martes, 21 de mayo de 2019

Refugio y cárcel


Lo malo de los muros
es que lo que se gana en seguridad,
se pierde en horizonte.
El Roto.

Escribir es el consuelo
de los que carecen de consuelo;
por eso uno no escribe
para hacerse la vida más fácil,
sino para complicársela más.
Así va el poeta juntando palabras
que van formando ideas
casi absurdas, laberínticas,
de las que luego no puede salir.
Escribir es su refugio y su cárcel.